domingo, 2 de agosto de 2015

Pasión

Y si vuelves, que sea por pasión, no por pena, que las garras del aburrimiento no arañen tu ilusión e inquietud. No abandones el abismo por un agradable camino, salta con los ojos abiertos y vuela hacia donde llegues y de ahí corre y luego brinca y disfruta y quédate si te hace feliz pero cambia si empieza el aburrimiento. No vuelvas por la costumbre de una cara agradable, quédate por la belleza de algo increíble o vete si no es eso lo que ves, busca lo que te haga tiritar de nervios, lo que te erice la piel, lo que te haga florecer lágrimas con carcajadas. La calma es hermosa entre tempestades.

Amor marchito

Y al volver me miraste cara a cara, como una lechuza en la noche, como una liebre descarada. Me miraste y me dijiste que siempre me habías querido, que el tiempo no cambió nada, que si en otro tiempo todo hubiera surgido, si la gente, si los vientos, si tú y yo, sólo eso. Si el miedo no hubiese impedido que el amor allí latente en fuego acabase convertido, ahora no lamentaríamos el tiempo ya perdido, el tiempo se marchó, la vida ya se nos ha ido. Volvió a girar su cabeza y siguió rumbo al río. Mi amor se fue para siempre entre los juncos marchitos.

Sincero

Ella me miró tras la ventana, siempre desde allí, nunca cara a cara, sin compartir brisa ni oxígeno. Yo sabía que me amaba, no lo sabía, mejor dicho lo intuía ¿lo intuía de veras? Creo que mejor dicho lo sospechaba ¿seguro? Bueno, creo que más bien lo deseaba. Entonces ¿te amaba? Puede ser que le agradase, o al menos le interesaba. Analiza tus palabras, ¿tú le interesabas a ella? De acuerdo, la amo, con todas mis fuerzas y realmente no sé ni si le caigo bien.

Abre la vida

Abre la puerta. ¿Cuál? Ábrela. ¿Por qué? La puerta está cerrada, debes abrirla. ¿Qué hay detrás? No sé, pero las puertas cerradas están para abrirlas en un momento dado, es el momento. ¿Quién lo dice? Yo lo digo, hazme caso. No me atrevo, si la puerta sigue cerrada será por algo. O no. Tus argumentos no me convencen, nada me obliga a abrir esa puerta, puedo vivir con ella cerrada. Crees que puedes vivir con ella cerrada, pero lo cierto es que no sabes qué hay detrás al igual que no sabes nada que no hayas hecho, el futuro es incierto y muchas veces hasta improbable. Ahora ya me da miedo tanto abrirla como no hacerlo. Sé que debes abrirla. ¿Por qué tú lo sabes y yo no puedo saberlo? Porque sí. No me gustan esas respuestas, ¿cómo que porque sí? Hazlo, ¡abre esa maldita puerta de una vez! Lo haré, pero te haré responsable de todo lo que haya allí o lo que pueda ocurrir ahora. Oh! Es precioso, qué belleza, ¿por eso querías que la abriera? No tenía ni idea de lo que había, pero es mejor arriesgarse y descubrir cosas nuevas que vivir en una eterna conformidad.

Mentes libres

Anoche me dijiste que no, que era tu última palabra y te dormiste. Me quedé largo rato pensando, dando vueltas en la cama, intentando razonar el porqué de tu respuesta, el porqué de esa actitud, no me imaginaba cual sería el tamaño del iceberg que se escondía bajo el basto océano de nuestra relación. Por fin lo comprendí, me costó, no creas, entenderte no es fácil la mayor parte de las veces, tienes una rara habilidad para hacer difícil lo sencillo y demasiado fácil lo complejo, cosa que nos ha costado más de un disgusto. Pero finalmente lo entendí, no me refiero al porqué exacto de ese hecho, sino al origen que te hizo responderme eso, tienes solo cinco años, tu mente está nueva, tu lógica es pura, no influida, yo ya tengo unas pautas marcadas, tú aun no, y espero que no te influyan mucho, las mentes libres, los cambios en las reglas, los cuestionamientos, todo eso es lo que no debes perder, no aprendas tanto y razona todo, cuestiona todo e intenta cambiar todo. Nunca te conformes con este mundo, no está bien estructurado, es más, está bastante mal. Ojalá millones de personitas como tú vengan a arreglarlo. Las mentes libres cambiarán el mundo.